Les nostres recomanacions i propostes
Ressenya
David Le Breton
Desaparecer de sí
Per Autor convidat
19.7.2016
Desaparecer de sí puede preconcebirse como una invitación al descanso: detenerlo todo para reconocerse, salir de la velocidad diaria y observar los brotes verdes que el silencio siembra. Sin embargo, fabular sobre el título de este libro lleva a equívocos prematuros. Ausentarse no es sólo una propuesta sensata sino una forma de libertad radical, un acto de rebeldía frustrada, una mutilación sin espectadores. Calzarle una sordina al mundo sin dejar huella.
El aterrizaje de la promesa ilustrada de autonomía no exime al hombre que la busca de los residuos que provoca. El individuo contemporáneo, ese ser presuntamente amigable y potencialmente narciso, absorbe personajes, gestos y rutinas impropias. Se juega la identidad en escenarios móviles y desinfectados de vínculo social.
El deseo de ser uno mismo, que en otro tiempo nacía de una necesidad moral, se convierte hoy en una encrucijada que nos viene grande. No hay tiempo para cimentar la brecha que separa nuestro yo ideal de aquel que se tropieza, suda y ventosea. El ansia de desaparecer nos preside, somos seres carnales que agonizan en los bostezos.
Apela Le Breton a la blancura para dar cuenta de este cementerio de soledades. El blanco, por su condición de ser todos los colores y ninguno, se convierte en metáfora que describe el no lugar en el que la desaparición acontece. Así, la anorexia, la superposición de yoes, las huidas sin retorno, o el etilismo adolescente constituyen maneras de morir sin dejar de respirar.
¿Podemos aguantar lo quiebros de nuestra propia finitud?, ¿estamos preparados para vivir en un solo yo?
Aunque la radiografía de este irse adquiere formas perversas, Le Breton aboga, en el fondo, por un periplo con vuelta a casa. Un alejarse para ver mejor.